Queridos hermanos y hermanas,

en estos días teníamos un gran deseo de escribiros para contaros, a todos vosotros que nos sostenéis, los alegres eventos que el Señor nos está dando a vivir en este tiempo de Adviento, preparándonos así a la alegría más grande que es su venida en medio de nosotros.

En el último mes hemos tenido la gracia de vivir la ordenación diaconal de tres de nuestros seminaristas. Como sabéis, nuestro Seminario es diocesano y misionario latino, que sin embargo acoge también candidatos al presbiterado pertenecientes a diferentes ritos de la Iglesia oriental católica presentes aquí en Tierra Santa.

Es por eso que, la primera ordenación, que ha tenido lugar el 20 de Noviembre, fue un evento histórico, porque ha sido la primera vez que en nuestro seminario viene ordenado diacono un seminarista de rito maronita, Rodi, israelí de origen libanés, por la imposición de las manos del obispo monseñor Moussa El-Hage y en presencia de la comunidad de la arquidiócesis maronita de Haifa y Terrasanta.

    

Posteriormente el 9 de Diciembre, también han sido ordenados diáconos Juan Manuel, proveniente de Colombia, y Giovanni, de Italia. Siendo en este caso seminaristas de rito latino fueron ordenados por el nuevo administrador apostólico del patriarcado de Jerusalén de los Latinos, recientemente nominado por el Papa Francisco, monseñor Pierbattista Pizzaballa. Para él era la primera vez que confería como Obispo una ordenación.

 

Como es maravilloso, queridos hermanos, ver la generosidad con que estos jóvenes ofrecen la propia vida para servir a la Iglesia, la esperanza que anima sus deseos de anunciar el amor de Dios a cada hombre, la alegría con la cual viven su misión de obrar en esta pequeña y atormentada viña que es la Iglesia de Tierra Santa.

Estamos agradecidos a Dios, a la Iglesia, al Camino, a Kiko, Carmen y P. Mario, a nuestros catequistas y a todos vosotros, por estos frutos. ¿Qué somos nosotros para ser espectadores de tantas maravillas en la Iglesia? Seguramente también Carmen (que amaba tanto la Tierra Santa) se habrá alegrado en el cielo…

Os tenemos que dar gracias por la ayuda que siempre nos ofrecéis, y en particular en este periodo de fiestas. Como sabéis, nuestro seminario puede ir adelante solo gracias a la generosidad de quien como vosotros eligen de sostenerlo para mantener viva su misión en Tierra Santa. Nosotros os recordamos cada día en la adoración al Santísimo sacramento, pero en esta Navidad desde Belén saldrá nuestra oración para vosotros. Donde Jesús ha elegido descender para meter su tienda entre los hombres y donde tendremos la gracia de celebrar la Santa Noche de Navidad.

Esperamos fuertemente que estas noticias os alegren y os ayuden a ver la obra de Dios que actúa en la vida de todos nosotros, sus hijos, con la ternura de un Padre bueno. En estos últimos días que nos separan de la Navidad, os deseamos verdaderamente que el corazón de cada uno de vosotros pueda abrirse para acoger a Cristo que viene y podáis contemplarlo con el estupor de los niños y la simplicidad de los pastores de Belén.

Rezamos en este tiempo que se nos sea dada la gracia para acoger este gran misterio: nuestro Señor Jesucristo Rey del universo que se hace pequeño y pobre para venir a encontrar a todos aquellos que están dispuestos a acogerlo.

Dejemos ahora que la invitación de Isaías —«Consolad, consolad a mi pueblo»— resuene en nuestro corazón en este tiempo de Adviento. (…). Si nosotros nos encomendamos a Él con corazón humilde y arrepentido, Él derrumbará los muros del mal, llenará los vacíos de nuestras omisiones, allanará las dosis de soberbia y vanidad y abrirá el camino del encuentro con Él. (Papa Francisco, Angelus 7 de Diciembre de 2014)

 

Feliz Navidad!

Los formadores del Seminario,

P. Francesco Giosuè Voltaggio

P. Paolo Alfieri

P. Germano Lori

P. Antonio Martin Carrasco

 

 

P.S.: aquí puedeis encontrar el link del Sitio del Patriarcado Latino di Jerusalén, donde podéis leer el artículo relativo a las ordenaciones diaconales y encontrar más fotos de las ordenaciones diaconales: http://it.lpj.org/2016/12/14/ordinazioni-diaconali-al redemptoris-mater-di-galilea-il-servizio-e-la-forma-piu-alta-che-una-vita-puo-assumere/

 

 

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